Un delito doloso es aquel que presenta una conducta culpable, punible y en contra de la ley. Ocurre cuando se realiza una acción que perjudica a otra persona siendo quien provoca el daño consciente de sus actos y lo hace por voluntad propia sabiendo que está infringiendo la ley. Además, la persona no demuestra ningún tipo de causa que implique una justificación que permita al delincuente ser eximido de la culpa.
Esto significa que quien delinque, si entra en la figura de delito doloso, lo hace con la conciencia de que lo que está realizando en ese momento está mal. Esto significa que lo hace voluntariamente sin ser coaccionado ni obligado por otra persona.
Elementos del delito doloso
Un delito doloso está compuesto por dos partes que lo transforman en tal. La primera de ellas es la conciencia del criminal en conocer la gravedad del hecho que está por cometer. La segunda corresponde a la voluntad de llevar a cabo dicha acción. Sin embargo, en muchas ocasiones no podemos hablar de dolo, por ejemplo cuando el individuo tiene discapacidad mental o problemas psicológicos.
Ejemplos de delito doloso
Comisión por omisión
- Una persona que sale sin ropa a la calle teniendo la conciencia de que eso está mal porque falta a la moral y a las buenas costumbres. En este caso, el delito que se comete es el de exhibicionismo.
- Tirar basura en lugares prohibidos.
- Pegar carteles en lugares donde no está permitido.
Dolo directo o de primer grado
- Planear un asesinato atropellando a la víctima con un automóvil. Es decir que el homicidio se lleva a cabo con éxito.
- Un asesino a sueldo apunta su arma y asesina a su víctima de un tiro certero.
Dolo directo o de segundo grado.
- Al planear un homicidio, se realiza el intento cuando la persona perjudicada está acompañada de otro individuo. Por ejemplo, si se dispara un arma y las victimas son más de una, además del destinatario principal, se asesina a otra persona.
- En caso de atropellar a varios peatones en lugar de solo hacerlo con quien es el blanco o víctima del asesinato.
Dolo eventual
- Un ladrón entra en un negocio e intenta robar un teléfono móvil. si bien sabe que puede salir mal, porque puede ser descubierto en el acto, igualmente continua con su acción aceptando las consecuencias.
- En el asalto a un banco, los ladrones se arriesgan a ser arrestados por la policía pero aún así continúan con su cometido.