Las oraciones de la mañana siempre son lo primero que se dice en el día al despertar. Es la manera en la que las personas de cualquier religión tienen para comunicarse con su Dios y así pedirle que el día transcurra sin sobresaltos.
Al rezar, la persona abre su corazón y conversa con Dios sobre sus problemas y tribulaciones. La gran mayoría sienten que su corazón se liberó de un peso y tienen fe en que su día va a mejorar en cada momento.
Ejemplos de oraciones de la mañana
Oración de agradecimiento
“Buenos días, Dios. Te doy las gracias y te ofrezco mi primer pensamiento al iniciar este nuevo día.
Respiro el aire puro de la mañana que nos das. Lo primero que he visto es la luz de tu presencia en mi habitación y en mi alma.
Te agradezco por dejarme abrir los ojos hoy también, y te pido me permitas hacerlo de nuevo mañana.
Gracias también te doy por permitirme descansar en una cama caliente y confortable, que no muchas otras personas pueden tener. Gracias por la bendición de este día.”
Los principales motivos por los que los creyentes rezan por la mañana, es para dar las gracias por tener un nuevo día de vida, para pedirle a dios que los proteja y para brindar todo tipo de acciones positivas al prójimo a lo largo de la jornada.
Dios todo poderoso
“Todo poderoso y santo padre, te ruego que mis requerimientos de paz, calma y tranquilidad lleguen a mí, especialmente en esta bella mañana y que por tu intercesión mi alma y tu grandísima voluntad se formen en una sola. Quiero que este día que empieza sea de provecho para mí y para los míos. Quiero, desde el fondo de mi corazón, realizar buenas acciones.
Deseo lograr todo lo que quiero para hoy y todos los días que me des de vida, Señor.
Ayúdame a ser positiva, paciente, comprensiva, dulce y prudente.
No permitas que vea, escuche, haga o diga calumnia, mentira o maldad alguna.
Retira de mi cabeza malos pensamientos pues solo han de perjudicarme en todo.
Ayúdame a que sólo los pensamientos caritativos y buenos permanezcan en mi espíritu.
Hazme sonreír durante todo el día sin importar cuantos problemas puedan esperarme.
Revísteme de ti, Señor, y que a lo largo de este día yo te irradie. Amén”.
Oración al ángel de la guarda
“Ángel de Dios, bajo cuya custodia me puso el Señor con amorosa piedad, a mí que soy vuestro encomendado, alumbradme hoy, guardadme, regidme y gobernadme.
Amén.”
Oraciones al padre
“En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, Amén.
Al levantarnos acudimos a ti, oh Padre, y te entonamos, el himno angelical: Santo, Santo, Santo eres tú, oh Dios, por la Madre de Dios, ten piedad de nosotros.
Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo.
Del lecho y del sueño me permitiste levantarme, Señor. Te pido que le des luz a mi espíritu y corazón, y que en mis labios pongas las más bellas alabanzas.
Oh Santa Trinidad, te canto: Santo, Santo, Santo eres tú, oh Dios por la intercesión de la Madre de Dios, ten piedad de nosotros.
Ahora y siempre y por los siglos de los siglos.
Amén.
Santo, Santo, Santo eres tú, oh Dios, por tu Santa Madre ten piedad de nosotros.
Señor ten piedad (repetir 6 veces)”.
Oración por el amor del Señor
“Exclamo y bendigo tu nombre gran señor, pues tus acciones maravillosas siempre van dirigidas a nuestro bien y el del mundo que nos rodea. Bendigo, Señor, tu misericordia, porque nos permites vivir todo un día, llegar a la noche y despertar cubiertos de tu benevolencia. Porque por tu amor, Señor, yo me ofrezco siempre ante tus plantas para que mis debilidades y agobios de mi carne sean curados. Rey Inmortal, Rey Alabado, Rey Excelso, Dueño de mi vida, te dedico mi oración para agradecer tu amor. Te doy gracias por perdonar mis faltas y por librarme de la desesperación y el dolor.
Tú eres el Dios glorificado, Padre Eterno.
Por tu amor yo vivo, por tu amor me esfuerzo, por tu amor me entrego a la más pura bondad, y te lo demuestro en mis acciones que realizo en tu nombre, para ser digno de tu misericordia.
Amén”.