Ejemplos de leguminosas

Las leguminosas, conocidas también como fabáceas son un grupo de árboles, arbustos y otros similares cuyo fruto es fácilmente reconocible, pues presenta forma de legumbre o semilla. Desde que el hombre conquistó la agricultura, se han convertido en una parte importante de la alimentación y aún, hoy en día, son algo esencial dentro de la dieta humana gracias a sus propiedades y a su versatilidad al momento de prepararlas en diferentes platillos.

Se trata de un tipo de alimentos que son muy bajos en grasas que cuenta con una gran cantidad de fibra lo cual previene el estreñimiento, un bajo contenido de sodio pero es una gran fuente de potasio, magnesio y ácido fólico (vitamina que pertenece al grupo B). Poseen también un gran contenido de proteína que se asemeja al de la carne y no producen colesterol malo en la sangre. En cuanto a la cantidad de azúcar que contienen, esta es escasa por lo que las convierte en el alimento ideal para aquellas personas que son diabéticas o que presentan intolerancia a la glucosa.

La soja es una de las leguminosas más utilizadas en todo el mundo.

Consumir legumbres puede ayudar a eliminar un gran numero en enfermedades tales como los problemas cardíacos, la diabetes y también la obesidad.

Además de proporcionar un gran valor nutritivo a nuestro organismo, las leguminosas durante el proceso de siembra y recolección le brindan a la tierra una gran cantidad de oxígeno y vitaminas. Esto se debe a los procesos por los que pasan sus raíces las cuales recorren gran parte del terreno y permite que la tierra se oxigene y adquiera las vitaminas mucho más fácilmente. Esto, como consecuencia permite que las mismas plantas preparen la tierra para futuros cultivos lo cual es muy beneficioso a largo plazo.