La coprolalia es una patología que, quien la padece, tiene una tendencia sin frenos de decir malas palabras, ser grosero y usar lenguaje vulgar. Es un trastorno que se asocia a diferentes tipos de enfermedades psicológicas tales como el síndrome de Tourette en el que la persona tiene tics, movimientos del cuerpo sin control y dicen palabras sn sentido sin poder reprimirlo.
La coprolalia es un trastorno que comienza en la niñez y presenta diferentes tipos de síntomas tales como los tics nerviosos, palabras mal vistas en la sociedad. Esto puede provocar que el individuo tenga problemas para socializar con el resto de las personas.
Las malas palabras suelen ser dichas sin sentido y de manera involuntaria. Es un trastorno que desinhibe a la persona la cual no siente culpa por lo que está sintiendo aunque su forma de actuar puede quitarle la concentración y provocarle ansiedad.
Desde el punto de vista de su significado, la palabra coprolalia proviene del griego con κόπρος y cuyo significado es “heces” y se completa con λαλία que quiere decir “balbucear”.
Causas y tratamiento de la coprolalia
Aún no se conocen las causas que originan este trastorno aunque se llego a la conclusión de que se trata de un funcionamiento erróneo de los neurotransmisores que tienen impulsos incontrolables los cuales causan el habla involuntaria y los movimientos bruscos.
El tratamiento para este trastorno consiste en aplicar toxina butolínica que causa relajación temporal en las cuerdas vocales y en los músculos los cuales también relajan un tanto los músculos evitando que el individuo se transforme en un ser brusco. Además, existen ejercicios para eliminar el estrés y la ansiedad que complementan los anteriores.
Ejemplos de coprolalia
- Pegar patadas a todas las personas de forma inconsciente.
- Insultar a personas que son completas desconocidas.
- Tener tics y movimientos bruscos con el cuerpo.
- Insultar a alguien que se conoce muy poco por el simple hecho de que hizo algo que no se desea.
- Tratar a alguien de forma negativa o humillante or el simple hecho de no cumplir con nuestros estándares.
- Reaccionar en forma violenta sin que exista una razón.
- Insultar a alguien tan solo por haberse cruzado en su camino y caminar lento.
- Auto agresión hacia si mismo.
- Llegar al nivel de agresividad tal que la persona necesite un calmante.
- Darle un golpe a un extraño por tan solo mirarlo de manera desagradable.